PARA VENDER MÁS
Primero te explico cómo funciona esto.
Para atenderte como te mereces y cómo a mí me gusta hace falta tiempo. Y el mío, como el tuyo, es limitado. Por eso no ofrezco todos mis servicios a la vez. Durante un tiempo ofrezco un servicio y a veces otro.
Y para poder acceder a mis servicios tienes que estar en mi lista de correo. En mis e-mails pongo siempre un enlace al servicio que estoy ofreciendo en ese momento, con todos los detalles y con su precio.
Aquí debajo te explico un poco mis dos servicios principales. Si quieres saber más, cuando te apuntes a mi lista recibirás toda la información en mis e-mails.
Y si tienes dudas mándame un mail y lo aclaramos
1. Vamos con saber vender
La venta es la gran asignatura pendiente para el 90% de las empresas ¿Por qué pasa esto?
Pues porque seguimos pensando
■ Que un buen producto o servicio se vende sólo.
■ Que hay que dar muchas opciones a los clientes.
■ Que hay que ser muy servicial y complaciente.
Pero, aunque esto es lo que se ha hecho todo la vida, la venta es totalmente contraintuitiva. Y nada de lo anterior funciona.
Para tener éxito en la venta hay que empezar por la mentalidad.
Para vender más y a mejores clientes la mentalidad con la que te acercas a ellos es la base de todo. Siento decirte que si afrontas la venta con miedo o con necesidad tus clientes potenciales lo van a notar a la legua y van a salir corriendo.
Y eso lo estás transmitiendo sin darte cuenta.
Con un excesivo formalismo, accediendo a todas las peticiones que te hacen por irracionales que sean, teniendo unos precios bajos, ....
Pero si te pones a su mismo nivel, si empiezas a liderar el proceso, si validas a tus clientes en lugar de dejarte validar, entonces vas a notar un cambio radical.
Lo malo de la mentalidad es que no se aprende. Pero sí que se puede interiorizar y mejorar con la ayuda de técnicas y herramientas que cada vez te dan más seguridad y transmiten mayor confianza a tus clientes.
Si quieres ayuda con esto puedes contratar una formación en ventas, práctica y al grano, sin rollos. Configurada especialmente para tu negocio. Una formación que te va a ayudar a adquirir la mentalidad necesaria para poner tus ventas a otro nivel.
Y como es una formación muy práctica vemos las técnicas y herramientas que te van a ayudar a enfocar la venta desde el ángulo adecuado y a saber qué tienes que hacer en cada momento de la relación con tu cliente potencial.
■ Para que despiertes su interés desde el primer contacto.
■ Para que sepas cómo escribir e-mails que consigan respuestas.
■ Para que sepas cómo transmitir correctamente el valor de lo que vendes.
■ Para que puedas dar el precio con seguridad.
■ Para que consigas cerrar más ventas.
Me apunto a la lista para saber cómo es esa formación en ventas personalizada
Pues porque seguimos pensando
■ Que un buen producto o servicio se vende sólo.
■ Que hay que dar muchas opciones a los clientes.
■ Que hay que ser muy servicial y complaciente.
Pero, aunque esto es lo que se ha hecho todo la vida, la venta es totalmente contraintuitiva. Y nada de lo anterior funciona.
Me apunto a la lista para saber cómo es esa formación en ventas personalizada
2. Vamos con tener un proceso de venta optimizado
Mira, vender es la principal actividad para cualquier empresa. Sin ventas no hay alimento. Por muy bueno que sea tu producto o servicio, sin ventas ningún negocio puede subsistir. Pues increíblemente la mayoría de las pymes, están mucho más centradas en sus procesos técnico-productivos que en la venta.
Y eso hace que los procesos de venta sean larguísimos e ineficientes. Que estés trabajando con clientes que te marean. Que te piden más y más información. Que te cambian los pedidos. Que te adelantan los plazos de entrega. Que te piden descuentos. Que te llaman a cualquier hora.
Y esto está pasando porque tu proceso de venta no filtra las malas oportunidades y los malos clientes. Y así no hay hijo de vecino que pueda planificar, organizarse ni ser productivo. Así el día a día se convierte en un continuo apagar fuegos y por más horas que metas nunca se consigue terminar las tareas previstas para el día.
Por no hablar de lo negativo que resulta todo esto para tu rentabilidad.
Y lo peor es que esta forma de trabajar te está impidiendo dirigirte a los buenos clientes. A los que te van a respetar a ti y a tus condiciones. A los que están dispuestos a pagar tus precios sin ningún problema porque valoran la solución que les aportas.
También pasa que esos procesos larguísimos y mal enfocados están haciendo que las ventas sean escasas. Y como no se hace una buena prospección, no se captan suficientes clientes. Y cuando se captan no se cierra la venta rápido. Y mientras tanto la empresa ¿de qué vive? No quiero ponerme en la piel de quien está continuamente agobiado por esta incertidumbre.
Lo peor es cuando se dan las dos cosas a la vez. Pocas ventas y a malos clientes.
Bien, en estos casos no se trata de meter más horas. Lo que hay que hacer urgentemente es revisar el proceso de ventas. Porque mejorar tu proceso de venta es la mejor inversión a presente y a futuro que una pyme puede realizar. Es lo más rápido y barato que puedes hacer para vender más y a mejores clientes y tener paz mental.
Lo mismo te interesa pinchar aquí abajo para ver cómo te puedo ayudar a optimizar y acortar tu proceso de venta para que funcione como un reloj suizo. Y sin que tengas que meter más horas.
Me apunto a la lista para saber más sobre optimizar y acortar mi proceso de venta
Mira, vender es la principal actividad para cualquier empresa. Sin ventas no hay alimento. Por muy bueno que sea tu producto o servicio, sin ventas ningún negocio puede subsistir. Pues increíblemente la mayoría de las pymes, están mucho más centradas en sus procesos técnico-productivos que en la venta.
Y eso hace que los procesos de venta sean larguísimos e ineficientes. Que estés trabajando con clientes que te marean. Que te piden más y más información. Que te cambian los pedidos. Que te adelantan los plazos de entrega. Que te piden descuentos. Que te llaman a cualquier hora.
Y esto está pasando porque tu proceso de venta no filtra las malas oportunidades y los malos clientes. Y así no hay hijo de vecino que pueda planificar, organizarse ni ser productivo. Así el día a día se convierte en un continuo apagar fuegos y por más horas que metas nunca se consigue terminar las tareas previstas para el día.
Por no hablar de lo negativo que resulta todo esto para tu rentabilidad.
Y lo peor es que esta forma de trabajar te está impidiendo dirigirte a los buenos clientes. A los que te van a respetar a ti y a tus condiciones. A los que están dispuestos a pagar tus precios sin ningún problema porque valoran la solución que les aportas.
También pasa que esos procesos larguísimos y mal enfocados están haciendo que las ventas sean escasas. Y como no se hace una buena prospección, no se captan suficientes clientes. Y cuando se captan no se cierra la venta rápido. Y mientras tanto la empresa ¿de qué vive? No quiero ponerme en la piel de quien está continuamente agobiado por esta incertidumbre.
Lo peor es cuando se dan las dos cosas a la vez. Pocas ventas y a malos clientes.
Bien, en estos casos no se trata de meter más horas. Lo que hay que hacer urgentemente es revisar el proceso de ventas. Porque mejorar tu proceso de venta es la mejor inversión a presente y a futuro que una pyme puede realizar. Es lo más rápido y barato que puedes hacer para vender más y a mejores clientes y tener paz mental.
Lo mismo te interesa pinchar aquí abajo para ver cómo te puedo ayudar a optimizar y acortar tu proceso de venta para que funcione como un reloj suizo. Y sin que tengas que meter más horas.
Me apunto a la lista para saber más sobre optimizar y acortar mi proceso de venta